Cuando aprendes a conducir, uno de los primeros dolores de cabeza se presenta cuando tienes que estacionar el auto y el espacio del que dispones es apenas un poco mayor que la longitud del vehículo. Para poder aparcar correctamente se utiliza el método de estacionarse en paralelo; el cuál consiste en lo siguiente:
Mira por el espejo retrovisor y usa tu direccional. Para a una distancia de 2 a 3 pies al lado del vehículo de adelante y alinea las defensas traseras.
Cambia a "REVERSA." Mira por arriba del hombro y frena (no aceleres) a la misma velocidad de caminar.
Mira hacia atrás al retroceder muy lentamente y gira la rueda completamente hacia el borde. Cuando el vehículo esté a un ángulo de 45 grados con el borde y las ruedas delanteras estén alineadas con las traseras del otro auto, endereza las llantas y retrocede lentamente en línea recta.
Observa el frente del auto para asegurarte de que entra bien. Cuando el guardafango trasero izquierdo esté alineado con el guardafango delantero izquierdo del vehículo de atrás, gira las ruedas bien hacia la izquierda y continúa yendo lentamente hacia atrás.
Cuando estés paralelo al borde, endereza las ruedas y centra el vehículo en el espacio.
Al salir, retrocede lentamente hasta que puedas ver las llantas traseras del auto.
Observa el punto ciego para ver si hay peatones y tráfico. Señala y cede el paso a los vehículos.
Busca la calle que deseas, apaga la señal y mira por el espejo retrovisor.
Lee más en: Cómo estacionarse en paralelo
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